miércoles, 11 de marzo de 2015

LA MOTO

Todo empezó siendo yo muy pequeñito. Siempre he sido muy decidido, muy visceral, no me da tiempo a pensar dos veces. Desde que ví una moto, he querido tenerla. Pero siempre había otras cosas antes y si no, le daba miedo a mi madre y claro, al final  me convencía de que había cosas más importantes.
En mi vida he pasado muchas cosas: pérdida de seres queridos muy cercanos, problemas por no tener un trabajo estable, hipoteca…en general, los problemas de todo el mundo. Y quizá por eso, en mis peores momentos me he dado cuenta de que al final, estamos de paso, así que de vez en cuando hay que darse algún capricho. Por eso decidí  comprar una moto.
Por fin, la compré. “Mi primera moto”, nada más y nada menos que una HARLEY DAVIDSON. Ahora estoy inflado de felicidad y satisfacción con mi moto. Incluso cuando estoy simplemente mirándola, no puedo quitarme ese sentimiento. Soy feliz. Igual es absurdo pero es lo que me hacía falta.

Iñigo Beitia

1 comentario:

  1. buena decision hay que hacer realidad los sueños en la medida de lo posible

    ResponderEliminar